Conservante natural obtenido de la fermentación de la bacteria Latococcus lactis, se puede utilizar en la producción de quesos madurados, alimentos pasteurizados, sopas, frankfurters, verduras en lata, zumos de fruta y de muchos otros productos. Extiende la duración del producto actuando contra las bacterias Gram-positivas, incluidas las resistentes a los tratamientos térmicos.